Las Águilas del Zulia viven un momento gris en la ronda semifinal que apenas comienza, al perder sus dos primeros compromisos; en el primero contaron con poca ayuda de sus lanzadores y en el segundo (anoche) se toparon con un Andrew Baldwin que lanzó siete sólidos episodios.
Si combinamos lo ocurrido en la última semana de ronda regular junto a lo hecho en el Round Robin por las Águilas del Zulia, nos damos cuenta de que cosechan siete derrotas al hilo, de la mano de una pobre ofensiva y de un pitcheo bastante irregular.
El único bate de poder que tienen los rapaces, Ernesto Mejía, aún busca su primer imparable del todos contra todos, luego de ocho viajes al plato y de poncharse en cuatro ocasiones. El inicialista debe despertar para fabricar las carreras necesarias en la ofensiva del Zulia.
Para mayor desgracia de Águilas, el relevo no ha estado bien. Muestra de ello es que todos los relevistas que han visto acción por parte del conjunto zuliano, a excepción de Marcos Tábata, han permitido, como mínimo, una carrera limpia. La efectividad de su cuerpo de relevistas es de 10.13, mayor a la que dejaron César Valdez y Adalberto Méndez colectivamente (6.75).
Después de la tercera jornada del Round Robin, Águilas ocupa el fondo de la tabla de posiciones, por detrás de Caribes, Tigres, Tiburones y Magallanes, en orden respectivo.
Hoy en Puerto La Cruz
Dwayne Pollok tratará de inaugurar la casilla de triunfos de los aguiluchos en esta semifinal, esta noche, al medirse a Ramón Ramírez en el segundo de la serie contra Caribes de Anzoátegui, en el Alfonso «Chico» Carrasquel a las 7:30 pm. El derecho realizó una presentación ante Caribes en la temporada regular, donde lanzó 4.2 entradas, permitió seis imparables y tres carreras limpias; al final cargó con la derrota.
El departamento de prensa de Águilas recordó que mantienen una cadena de 10 derrotas como visitantes en todos contra todos.
Por: Juan Manuel Páez
Twitter: @jmanupz