Greivis Vásquez ya se estrenó con Memphis.
Cuando Greivis Vásquez recibió el llamado desde el banquillo, el pasado sábado, para debutar en la NBA con los Grizzlies de Memphis, Carl Herrera y Oscar Torres recordaron la primera vez que pisaron una cancha de la NBA.
Herrera y Torres fueron los primeros venezolanos en llegar al mejor baloncesto del mundo. Ambos hicieron un alto en sus agendas para “bendecir” al piloto capitalino, quien fue tomado en el puesto 28 de primera ronda del pasado draft, en junio.
Todos tienen algo en común, tuvieron pocos minutos en su estreno, pero lo definen como un día inolvidable.
“Cuando salía a ese primer juego estaba nervioso, a pesar de la experiencia que ya tenía tanto en Venezuela como en otras ligas. Fue una enorme presión”, dijo Herrera, vía electrónica, desde Puebla, México, donde funge como asistente técnico de Nelson Solórzano con los Ángeles de Puebla.
El oriundo de Trinidad y Tobago cortó el celofán en la NBA, el 12 de noviembre de 1991, con el uniforme de los Rockets de Houston que derrotaron a Dallas. El alero estuvo cinco minutos en cancha y se fue sin puntos.
Una década más tarde, el caraqueño Torres recibió el testigo de Herrera al estrenarse, el 30 de octubre de 2001, con los tejanos frente a los Halcones de Atlanta. El piloto apenas vio un minuto de acción. Tampoco pudo anotar.
“Había mucho nervio. Uno siempre sale con las ganas de impresionar. Uno después cae en cuenta de todo y saber que representas a tu país es más que suficiente”, expresó Torres, quien milita con Marinos de Anzoátegui en el baloncesto profesional venezolano.
En su inicio con los osos pardos, Vásquez jugó dos minutos con 43 segundos del último cuarto en el triunfo sobre Minnesota 109-89. Falló en su único intento y dio una falta.
“Después de todo, las cosas van tomando su nivel y luego te vas amoldando. Enfrentas jugadores de mayor calibre y eso siempre sirve para crecer como ‘rookie’ en un primer año”, aseguró Herrera, quien es el primer y único patrio en ganar un campeonato de la NBA. Lo hizo en dos temporadas (1994 y 1995).
“Greivis tiene que ser inteligente cada vez que esté en la cancha. Tiene que ganarse la titularidad como cualquier otro. Lo logrará, es un muchacho bien humilde”, aseveró Torres.
Para el ex piloto de los Terrapins de Maryland en el baloncesto universitario norteamericano y ganador del premio Bob Cousy unirse a Herrera y Torres significa una cuestión de orgullo.
“Siempre lo he dicho y no me cansaré de decirlo. Poner mi nombre al lado de dos grandes ídolos de mi infancia es más que un sueño hecho realidad. Conozco a Carl y a Oscar. Son grandes amigos y mentores. Cada vez que puedo hablo con ellos y eso me llena mucho”, subrayó Vásquez.
Por: Mauricio Hernández/Panorama
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