Greivis Vásquez no está a la par de sus compañeros.
Su voz se escucha serena. A la vez, transmite entusiasmo, desde la lejana Memphis. Esta noche seguramente le tocará ver el primer juego de la temporada de los Grizzlies, en la NBA, de saco y corbata, al lado del banco -se recupera de una lesión en el tobillo derecho-. Pero el debut del criollo Greivis Vásquez está más cerca.
Los Grizzlies reciben a los Hawks de Atlanta, en el FedEx Fórum, a las 7:30 p.m., hora de Venezuela y Vásquez vivirá su primera noche en la NBA.
“Estoy preparado, al igual que el equipo. Es importante conseguir una primera victoria en casa. En cuanto a mi debut, prefiero no adelantarme, es decisión del entrenador. Depende de los primeros juegos del equipo y mi actuación en las prácticas. Tengo margen de error corto, necesito hacer las cosas bien. Creo que serán como dos semanas”, dijo vía telefónica.
Pese a que es cauto a la hora de hacer un anuncio, el base tuvo ayer su segunda jornada de prácticas de contacto físico a fondo, tras presentar molestias en el tobillo la semana pasada. Un indicativo de que su estreno como el tercer venezolano en jugar en la mejor liga del mundo, tras los pasos de Carl Herrera (1991) y Oscar Torres (2001), puede llegar rápido.
“Me siento bien, con ganas, positivo. Tengo que ganarme los minutos que necesito en la rotación. Estoy un poco atrasado con respecto al resto, me perdí toda la pretemporada, así que debo esperar mi oportunidad para jugar. No he sentido dolor, tengo los dolores normales de los entrenamientos, no tan intensos como hace una semana. El tobillo se está acostumbrando al trabajo, a la corredera, al contacto”, añade el piloto de 23 años y 1,97 metros, escogido por los Grizzlies en el puesto 28 de la primera ronda del draft.
Memphis tuvo en la pretemporada foja de 8-0, que hace pensar en las posibilidades del club para este año, según Vásquez.
“Vamos a llegar lejos. Tenemos el material y las herramientas para estar en los playoffs e incluso, por qué no, ganar una serie de postemporada. Pero debemos ir juego a juego”, dijo el ex astro de Maryland, que tiene como compañeros, entre otros, a Rudy Gay, Zach Randolph, Mike Conley. O.J. Mayo y Marc Gasol -también con molestias en un tobillo- con quien ha hecho buena amistad.
Hawks: un rival de respeto
Vásquez, ganador del premio Bob Cousy de 2010 al mejor armador del básquet colegial estadounidense, señala que es vital vencer a los Hawks.
“Es un rival difícil, no lo podemos subestimar. Tiene jugadores con talento, pero es que esto es la NBA, cada juego será duro y el primero más que nada. Esperamos que el factor x, el público, nos apoye”.
Greivis, quien esta vez no estará acompañado por su familia, también aspira a ver alguna bandera de Venezuela en las tribunas.
“Ojalá sea así para que podamos conectarnos. Yo soy optimista, pero a la vez paciente. Son 82 juegos de ronda regular y tengo que estar bien físicamente. Eso es lo que quiero. Hace cuatro meses, cuando me draftearon fue un sueño, ahora es una realidad, es mi trabajo, ya no me sorprendo. Llegó el tiempo de ser un hombrecito”.
Por: José Rubicco Huertas/El Universal
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