Saludos amigos fanáticos. Un gustazo saludarles. Esta semana nos enfocaremos un poco en el estadio “Pachencho” Romero, su realidad y futuro, en relación con la posibilidad de albergar nuevamente partidos de la vinotinto, el uso por parte del Zulia FC y el Unión Atlético Maracaibo y el dinero que llega por concepto de alquiler.
RUEDA EL BALÓN
Este fin de semana regresa el fútbol a Maracaibo. Desde hace casi tres meses no se jugaba en el “Pachencho” Romero y el inicio del torneo Apertura, tanto de Primera como de Segunda División, trae de vuelta la acción del balompié profesional al recinto marabino, el ex colosal vuelve a ver a rodar el balón sobre su gramado, no tan verde ni tan parejo como hace apenas dos años.
Es triste y deprimente el estado de abandono y desidia en el que se encuentra la sede de la final de Copa América en el 2007. Accesos intraficables, sucio por todas partes, filtraciones, olor a animal muerto en las oficinas, camerinos deteriorados, ascensor fuera de servicio, instalaciones (pizarra, cabinas de trasmisión, aires) dañadas y pare usted de contar.
¿Por qué está en estas condiciones el escenario que estuvo calificado por Conmebol como uno de los mejores del continente? Porque no tiene dolientes en el poder, así de sencillo. Los que permitieron que regresara al centralismo, donde ni siquiera sabrán dónde queda o quién fue “Pachencho” Romero, son también culpables de ver caerse en pedazos una estructura que contó con un presupuesto incalculable para su reestructuración.
Cuando escribo esto no he vuelto al “Pachencho”, después de una visita personal (no como periodista, porque no me habrían dejado entrar) el pasado miércoles, cuando pude ver lo que arriba les expongo. Sin embargo, con el inicio de los juegos del Zulia y el UAM no creo que me vaya a encontrar con un escenario diferente.
Lo que me permite visualizar que en el futuro cercano tampoco tendremos de vuelta a la vinotinto, a pesar que el técnico César Farías ha dicho que tendrá partidos en los meses de septiembre, octubre y noviembre. Triste realidad, pero así está el “Pachencho”, el mismo que parece destinado al olvido y caer en una situación en la que ya nadie quiera ni jugar ahí.
¿Y EL DINERO?
Siempre me ha causado intriga saber qué hacen con el dinero que llega a las oficinas de quienes hoy, por intermedio de Ministerio del Deporte y el IND, son las autoridades que deciden qué se hace y qué no en el “Pachencho” y en los otros espacios del Polideportivo, que quizás están peor que el estadio de fútbol.
Pero nadie responde. Hablan de autogestión y esas cosas. Seguiré tratando de conseguir esa respuesta, mientras tanto he ido averiguando cuánto pagan Zulia y UAM por usarlo.
Al petrolero le cobran 20 mil bolívares mensuales y al rojiazul 2 mil bolívares (no entiendo la amplia diferencia si ambos lo usan de la misma manera, pero eso es harina de otro costal). Estamos hablando que al año entran, sólo por ese concepto, más de 200 millones de bolívares de los viejos. ¿Dónde está esa plata?
La del último año, según la directiva del Zulia, se comprometieron a usarla en las reparaciones que necesitaba el estadio. Entonces me pregunto, ¿dónde queda la responsabilidad del Gobierno Nacional sobre las inversiones que debería hacer para mantener esas instalaciones?
Falta saber cuánto pagan las Águilas por el Luis Aparicio o mejor aún dónde está el dinero que deben cancelar por usar esos espacios “DEPORTIVOS” para eventos religiosos, musicales y hasta políticos.
Esto es lo que hay…
Por: Gilberto González
Twitter: @gilbertogv
Correo: [email protected]
Comments