El defensor Giovanni Romero puso el tanto definitivo. Foto: Nelson Pulido - Venezuelaesfutbol.com
Caracas FC se llevó el partido de ida de la final del fútbol nacional al vencer con un corto 1-0 al Deportivo Táchira en el encuentro celebrado este domingo en el estadio Olímpico, de Caracas, donde se presentó un llenazo impresionante, adornado por las fanaticadas de ambos equipos, que brindaron un ambiente desde antes de comenzar el compromiso, que fue sentenciado con un cabezazo de Giovanni Romero al minuto 15.
Sin mucho más que el oficio, los rojos lograron pegar el primer golpe en una serie a 180 minutos, que comenzó con un gran ritmo, pero que de a poco fue dejando la especulación y permitió que quedara abierta de cara al choque de vuelta que se celebrará el próximo domingo en el estadio Pueblo Nuevo, de San Cristóbal.
El primer aviso de los aurinegros fue cortesía de Jorge Rojas, quien en la fracción tres insinuó, con un disparo desde fuera del área, que el partido podría tener mucha emoción frente a cada arco.
Sin embargo, tras ese zurdazo se tuvo que esperar hasta el cuarto de hora para tener una nueva emoción. Ese instante fue decisivo, porque fue el momento en el cual Giovanni Romero cabeceó perfectamente un centro, desde el tiro de esquina, de Alejandro Guerra, para poner el 1-0.
Romero le ganó a José Luis Granados, de gris partido, en el salto y perforó la valla de un dormido Manuel Sanhouse que apenas reaccionó para sacar la pelota del fondo de al red.
El golpe fue duro para el Táchira, que apenas pudo reponerse del tanto con un par de remates aislados de Gerzón Chacón y Edgar Pérez Greco. Así se fueron al descanso.
Complemento
La diferencia, aunque corta, no disgustaba al Caracas, que se fijó como meta dejar su arco en cero. Para el Táchira buscar el tanto del empate fue su norte en la segunda mitad. Por ello intentaron como pudieron, sin embargo se toparon con una sólida defensa roja.
Rojas, quien no fue determinante para los suyos, estrellaba otro tiro libre en la barrera, mientras que un cabezado de David Solari, quien entró por el invisible Daniel Arismendi, fue a las manos del perfecto Renny Vega.
Caracas, sólo a la contra, casi liquida al partido, a no ser por el opotunismo de Chacón, quien con lo justo tapó un disparo de Jesús Gómez cuando ya Sanhouse parecía liquidado.
Los cambios de Táchira siguieron con la entrada de Yonathan Del Valle, quien con su velocidad sólo pudo poner un par de centros, mientras que Caracas con los ingresos de Darío Figueroa, César González y Alejandro Cichero sólo reafirmó su planteamiento y controló los tiempo de un partido, que dejó poco para el fútbol y mucho por jugar el próximo domingo en San Cristóbal.
Caracas ganó el primer tiempo por la mínima, pero no recibió gol en su casa, y obligó al carrusel a ganarle en Pueblo Nuevo.
Por: Gilberto González
@gilbertogv
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