Alex Rodríguez al fin conectó el ansiado jonrón 600.
Alex Rodríguez sacó el madero, ayer, y como un dios del trueno estremeció las alturas con su cuadrangular 600 y darle fin a una sequía de 12 partidos (46 turnos) para sumarse el prestigioso club. Qué mejor momento para tumbar la muralla. El 4 de agosto de 2007, logró los 500 cañonazos en el antiguo Yankee Stadium. Tres años después y a pocas cuadras, miles de fanáticos volvieron a rugir después de soltar el cañonazo ante el lanzador Shaun Marcum, de los Azulejos de Toronto, en el primer inning. El derecho lanzó en cuenta de 2-0 por el medio del plato y “A-Rod” no perdonó para sumar su décimo séptimo estacazo del año en victoria de los mulos 5-1.
“Había pasado un largo rato”, dijo Rodríguez a la agencia AP. “Pero claro que ha sido tremendo el gusto de dar ese gran jonrón y ayudar para conseguir la victoria”.
La pelota se elevó por encima del muro del jardín central y cayó en el Monument Park, donde el elenco del Bronx honra a sus legendarias figuras y donde probablemente, algún día, el toletero tendrá un busto con su nombre.
Después de la vuelta entera, Rodríguez salió del dogout como todo un héroe y recibió el saludo de sus compañeros.
“Sólo quería dar el hit. Ayer hablaba con algunos de mis compañeros y sólo me pedían que me relajase y no tratase de forzar las cosas”, expresó el antesalista, quien se convirtió en el jugador más joven en llegar a la cifra, a los 35 años. Babe Ruth fue el que más rápido llegó a los 600, con 36.
Rodríguez, tras años de actuaciones opacas, encendió la historia y ahora va por más.
Por: Mauricio Hernández/Panorama
LA VERDAD
Llega a 600 jonrones
Ahora sí, Álex Rodríguez se parará en el home sin preocupaciones. Luego de irse en blanco en sus últimos 17 turnos al bate, el antesalista de los Yankees de Nueva York largó el estacazo que grabó más su nombre en la historia del béisbol: su cuadrangular 600.
En su primer viaje al plato, en una jornada vespertina contra los Azulejos de Toronto y ante la mirada de 47 mil 659 fanáticos en el Yankee Stadium, «A-Rod» la depositó a 417 pies de distancia de la goma, por lo profundo del jardín central.
El estacazo que largó ante el derecho Shaun Marcum, quien le envió una recta a 89 millas por hora, se encontró a Derek Jeter en la inicial y puso en ventaja a los «Bombarderos» 2-0, en la primera entrada, caudal que seguirían hasta el final que le daría el triunfo 5-1 luego de tres derrotas en fila.
«Definitivamente, es un número especial», dijo Rodríguez al New York Post. «Estoy orgulloso de este logro y lo atesoraré por mucho, mucho tiempo. Hoy se dio el foco que necesitábamos para ganar y qué mejor manera que respirar desde la primera entrada».
Delante de Rodríguez, seis peloteros comparten su fama en el «Club de los 600», Barry Bonds (762), Hank Aaron (755), Babe Ruth (714), Willie Mays (660) y Ken Griffey Jr. (630), pero siendo el único activo el futuro pudiera depararle la corona entre los jonroneros de por vida.
Celebración
Aunque la nube del consumo de sustancias prohibidas rondará por siempre sobre su cabeza, ayer el béisbol era una fiesta. Un nuevo jonronero con 600 «bambinazos», una nueva pelota al Salón de la Fama y un nuevo yankee que suma otra gloria al equipo.
«Felicitaciones a Álex por este gran logro. Estamos especialmente orgullosos porque logró esta marca siendo un yankee y aquí, ante los fanáticos más leales en el béisbol», se dejó leer en un comunicado de prensa de los neoyorquinos.
Tres años después de su jonrón 500, justamente un 4 de agosto pero de 2007, vino el que hoy día lo coloca en el selecto grupo. El próximo objetivo, con probabilidad además de lograrlo esta campaña, será Sammy Sosa y sus 609 jonrones. Aunque por lo pronto, Álex se confiesa «en paz con su juego. Estoy en paz conmigo mismo».
EL UNIVERSAL
…Y llegó
No hubo necesidad de ver dónde iba a caer esa pelota para saber que Álex Rodríguez había conectado su jonrón 600. Apenas conectó esa recta afuera de Shaun Marcum, A-Rod se lo gozó, estirando sus brazos como gritándole «¡ahí está!» a los aficionados presentes en el Yankee Stadium.
El comportamiento de Rodríguez estuvo a la par de un jonronero de su clase, la de los 600 vuelacercas, cifra a la que solo han llegado otros 6 peloteros en la historia.
«Lo que más alegra es que lo hice en una victoria del equipo», dijo Rodríguez al término del encuentro que ganaron los mulos por 5-1 sobre Toronto. «Le comenté a mis compañeros que no iba a pensar en eso, solo en divertirme y relajarme».
Y vaya que se divirtió mientras le daba la vuelta al cuadro, cuando recibía las felicitaciones de sus compañeros y el respaldo del público que pidió a gritos su respectivo saludo.
En Nueva York sabían muy bien que eran testigos de un hecho importante y que, según los cálculos, no se volverá a ver por varios años.
Rodríguez se convirtió en el jugador más joven en llegar a los 600 estacazos, con apenas 35 años de edad, los cuales cumplió la semana pasada. Pero también será por mucho tiempo el último en arribar a esta importante cifra.
Entre los activos, el que está más cerca es Jim Thome (Minnesota) con 577, pero a sus 39 años de edad parece estar en su última campaña. Albert Pujols luce como el candidato, al tener poder y juventud de su lado; no obstante, aún habría que esperar varias campañas, pues totaliza 392.
«No sé hasta dónde llegaré. Solo agradezco a los aficionados por la paciencia mostrada antes de este 600», remató A-Rod, quien tardó 46 turnos entre su jonrón 599 y el 600.
Por su parte, Barry Bonds escribió un mensaje en su sitio de internet dándole la bienvenida a Rodríguez al club de los 600, y le dijo «sólo necesitas 163 más», para superar su marca de 762, que lo coloca como el máximo jonronero de la historia.
Por: José Manuel Fernández/El Universal
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