Ernesto Mejía ya luce el uniforme de Seibú.
La llegada de Ernesto Mejía a Japón fue impecable. Días después de ser presentado oficialmente por su nuevo equipo, los Leones de Seibu, arribó al archipiélago y este lunes dio su primera rueda de prensa, antesala de su inminente estreno en la exigente pelota asiática.
“Siempre fui un seguidor del beisbol japonés”, aseguró el jonronero portugueseño, cuyo contrato fue vendido a los felinos por los Bravos de Atlanta. “Creo que esta es una liga muy interesante. Cuando yo estaba creciendo como pelotero, era un gran aficionado de Alex Cabrera y él jugaba aquí”.
Mejía se presentó al parque de los Leones con un elegante traje oscuro, camisa gris y corbata clara, con el cabello recién cortado y el rostro completamente afeitado, sin su característico vello facial.
“Estoy muy contento de estar aquí”, indicó. “Aprecio la oportunidad que me están dando. Vine a ayudar al equipo a ganar juegos, porque me encanta ganar”.
Cabrera inició su brillante trayectoria en el Lejano Oriente precisamente con Seibu. Con esa novena, igualó en 2002 el récord de 55 jonrones que poseía el inmortal Sadaharu Oh, la máxima leyenda beisbolera en Japón.
El Samurái es uno de los 34 criollos que han visto acción en la NPB, las grandes ligas del archipiélago, una lista que encabezan tres ganadores del premio al Jugador Más Valioso: Cabrera, Roberto Petagine y Alexander Ramírez.
A pesar de esos antecedentes, Mejía no se desbordó en sus declaraciones, de acuerdo con lo publicado por el departamento de prensa de los melenudos en su canal de YouTube.
El aguilucho posó para los reporteros gráficos.
“Mi única ambición es jugar duro”, aseveró el toletero derecho. “Sé que en este beisbol hay jugadores muy veloces y que esta es una gran organización. Me gusta lo que he visto del estadio, hasta ahora. Me gusta el techo. Creo que eso va a ser interesante para mí. Me va a ayudar”.
Interrogado sobre su principal característica, la fuerza, mostró cautela, aunque hayan sido los extrabases lo que le dio reconocimientos en las menores y en Venezuela, donde fue Novato del Año y Más Valioso.
“Espero usar mi poder, dar jonrones”, admitió, “pero trataré de ser paciente, porque sé que los pitchers aquí son muy inteligentes y usan muchos envíos quebrados. Estoy muy al tanto de eso”.
Los Leones le asignaron el número 99. Apenas terminó de declarar, se puso la camisa de homeclub y posó para centenares de fotografías, entre el sonido de las cámaras y el relampagueo de los flashes.
“Intentaré mostrar lo mejor de mí cada vez que salga allá afuera”, prometió. “Terminé de jugar (en triple A) hace unos 10 días, así que debo estar en un 70 u 80 por ciento de mis condiciones. Pero creo que estaré bien, después de enfrentar a un par de lanzadores. Voy a estar pronto en forma. Me tomará dos o tres juegos”.
Mejía parece disfrutar ya de la nueva cultura en la que se ha sumergido. Durante la sesión fotográfica, bromeó con un abanico de papel que le dieron para posar con él.
Entre sus declaraciones, se le vio varias veces hacer la reverencia con la cabeza que usan los japoneses como símbolo de respeto por sus interlocutores. También asomó una media sonrisa en cuatro o cinco ocasiones, y se le vio feliz en el breve video promocional que grabó el club con su nueva figura internacional.
“Vamos a estar en los playoffs, eso lo sé”, terminó Mejía, el venezolano número 35 en nutrir la embajada que Roberto Marcano inauguró en 1975.
Por: Ignacio Serrano/Elemergente.com
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