Omar Vizquel será un utility defensivo de lujo para los Medias Blancas.
Cuando Omar Vizquel comenzó a escribir su leyenda como torpedero en las Grandes Ligas, algunos de sus actuales compañeros en el infield de los Medias Blancas apenas eran unos niños. Vizquel, ahora con 42 años y con 11 guantes de oro en su carrera, emprende otra campaña en 2010, esta vez con el equipo que dirige su compatriota venezolano Ozzie Guillén y en donde se espera que aporte toda su experiencia y siga mostrando su chispa.
Guillén y los jugadores están complacidos con la presencia de Vizquel, cuyo arribo en Chicago tiene ingrediente especial el que lucirá en su espalda el número 11 de su compatriota Luis Aparicio, ex de los Medias Blancas y único venezolano en el Salón de la Fama.
“Todavía siento la pasión de estar jugando pelota, soy una persona muy intranquila que siempre estoy dando brincos, haciendo ejercicios”, señaló Vizquel en el campo de entrenamiento primaveral de los Medias Blancas.
“Creo que la mejor manera (de mantenerse activo) es de venir a un equipo que tiene oportunidad de ganar y enseñar que puedo jugar pelota”, agregó.
Vizquel debutó en las Grandes Ligas con Seattle en 1989, cuando el cubano Alexei Ramírez –titular en el campocorto– era un chico de ocho años.
Tras cinco años en Seattle, donde en 1993 ganó el primero de 11 Guantes de Oro, pasó a los Indios de Cleveland. Ahí fue donde alcanzó la cima a lo largo de 11 campañas en las que obtuvo ocho Guantes de Oro por su prodigiosa defensa, la cual siguió desplegando al pasar a los Gigantes de San Francisco, con los que agregó dos premios más durante cuatro temporadas.
Vizquel jugó la pasada campaña con los Rangers de Texas y cubrió en algunos partidos la segunda y tercera base.
“Este año estoy preparado para jugar cualquier posición que se presente”, aseguró el venezolano, después de realizar una sesión liviana de fildeo con Ramírez al final de un entrenamiento. “Ya Ozzie me conoce de un pasado, (aunque) él sabe que a mí lo que me gusta es jugar es el campocorto. Ya encontraremos lugar y espacio para que él maneje a dónde me va a poner a jugar”.
Vizquel quiere ver mayor acción este año, ya que en Texas jugó nada más 62 partidos. Guillén prometió darle muchos juegos a su compatriota.
“Omar es un hombre muy importante en el equipo que nos trae mucha veteranía”, dijo el piloto de los Medias Blancas. “Va a jugar mucho. No viene para lo que le gente creía que iba a ser un coach. No. Omar es una pieza muy clave y va a estar en las tres posiciones (segunda, campocorto y antesala), pero más en el campocorto”.
“Para mí es un privilegio como dirigente tenerlo en el equipo”, agregó Guillén, un torpedero en sus tiempos de jugador.
Entre criollos
El lanzador venezolano Freddy García dijo que está orgulloso de tener a Vizquel como compañero.
“Cuando se retire va directo al Salón de la Fama”, dijo a la AP. “La experiencia que trae será buena para los novatos”.
Vizquel logró el visto bueno del legendario Aparicio para sacar del retiro el número 11 que utilizó con los Medias Blancas y lucirlo como en un gesto de homenaje. El 13 de Vizquel le pertenece a Guillén en Chicago.
La ilustre carrera de Aparicio, que incluyó nueve guantes de oro como campocorto, inició en Chicago en 1956.
“Estoy muy contento que Luis me haya dado el permiso para usarlo (el número 11)”, manifestó Vizquel. “Creo que su nombre hay que celebrarlo de una manera grande para que la gente hable de lo que él hizo en las Medias Blancas y la nueva generación que no había escuchado su nombre lo conozca”.
Por: AP
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