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Camacho: “Águilas nunca me valoró”

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El zuliano Juan Pablo Camacho la destrozó durante el fin de semana con Caribes.

El zuliano Juan Pablo Camacho la destrozó durante el fin de semana con Caribes.

Juan Pablo Camacho se bajó del avión que lo trajo desde Colombia hasta Puerto La Cruz convertido en un tornado. El marabino se alzó, ayer, como el jugador más valioso de la décima semana de la temporada 2010-2011 de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional.

Camacho, ex jugador de Águilas del Zulia, regresó al país después de vestir el uniforme de Águilas de Bogotá, en la Liga Colombiana que fue suspendida a causa de las lluvias. La semana pasada ingresó a la plantilla de Caribes de Anzoátegui.

“Lamentablemente, el mal tiempo que afectó a Venezuela y Colombia, hizo que esa liga se cancelara y tan pronto pude me comuniqué con el coach de bateo Lipso Nava, quien fue clave en mi regreso”, dijo el infielder zuliano.

En sólo dos días de acción, Camacho tomó 13 turnos oficiales al bate, en los que soltó nueve imparables, incluyendo tres vuelacercas, para finalizar con promedio de .692.

Además, el ex rapaz remolcó nueve carreras y anotó en tres oportunidades. “Estar en Colombia fue el chance de jugar todos los días. Es muy difícil estar sentado y ver a los demás jugar”, afirmó Camacho, quien fue dejado en libertad por los zulianos previo al inicio de la zafra.

“Después del final de la temporada pasada, antes de irme a Estados Unidos, tenía entendido que Zulia no me dejaría ir y que volvería. A mediados del año, me comuniqué con ellos y no me dieron una respuesta…”, aseguró el inicialista.

Ante la situación, Camacho tomó la decisión de aceptar la oferta del vecino país. “No quise darle prioridad a lo que ellos (Zulia) me estaban ofreciendo y quise vivir otra experiencia”.

En 25 juegos con los bogotanos, el toletero, de 29 años, dejó promedio de .426, producto de 38 inatrapables en 89 oportunidades en el plato. “Con Zulia nunca tuve un rol. Desde 2006 fui tercera base, receptor y hasta me tocó lanzar. Siempre he sido una persona que estaba dispuesto a dar lo que el equipo necesitaba. Águilas nunca me valoró”.

Camacho, quien debutó con los rapaces en 2000, reconoce que nunca pudo ganarse la confianza del club. “Sé que mis números no fueron los mejores y estoy claro en eso, pero como persona de béisbol, creo que es difícil poner números cuando tienes cinco días sentado”.

El marabino espera continuar con la tribu para el resto de la campaña y egresar al “Luis Aparicio” con el uniforme de los orientales en la postemporada. “Lo único que quiero es que la gente me reciba como siempre”, dijo.

Por: Mauricio Hernández/Panorama

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